Bueno, ni que decir tiene que fracasé estrepitosamente en mis propósitos de Año Nuevo...
Ahora solo me resta dejar que la vida retome poquito a poquito su cauce... ¿Podrá?
Sea como sea lo que tenga que ser será... Sólo pedir perdón a aquellas personas (especialmente a Fran) que se han visto afectadas por mi manera de ser y de reaccionar ante la vida... Siento mucho, pese a todo, no ser una princesita (puta o no puta) encantadora... Soy jodida, complicada, complico la vida a los demás... Lo siento mucho.
¿Estaría el mundo mejor si yo no hubiese nacido? Si nadie me hubiese conocido... Algunas personas pensarán que sí, por lo que les pido disculpas por existir... Lo siento de verdad.
Mi alma está como después de una guerra, cuando acaba y la gente se pregunta, ¿podrá la vida volver a ser como antes?
Siento que pase lo que pase, no vaya a dejar constancia de ello en este blog... Nunca volveré a escribir aquí, no porque quiera dejarlo, sino porque no quiero hacerle más daño a él, por si acaso entra y lo lee, no quiero que encuentre notas sobre lo mal o bien que estaré... Si tiene que olvidarme, para ser feliz, que lo haga.
Algún día volveré, supongo. La tentación... pero en otro blog y con otro nombre, quizá me cojais cariño como alguien diferente.
No voy a cerrar el blog (porque no tengo cojones), no tengo copias de las entradas... Pero si alguien me pide que lo cierre, lo haré.Sólo digo eso.
Por lo tanto es una despedida... Con la entrada peor hecha del mundo pero, ¿qué más me da?
Siempre recordaré este blog como registro de una época, aún no sé si buena o mala, pero importante de mi vida... Hasta siempre.